skip to main | skip to sidebar

jueves, 5 de abril de 2012

Quien toma la mano del dolor


Los humanos tenemos este impulso de dañarnos, de sentir cualquier clase de dolor ya sea físico o mental pero, ¿por qué lo hacemos?

No importa cuánto lo neguemos, la verdad es que nos causamos dolor queramos o no. Probablemente sea una especie de instinto que tengamos de auto castigarnos o más allá de eso, sea solo para sentir algo, para sentir que estamos vivos aún sea a costa del dolor. O puede, que simplemente sea un escape de un todo.

El amor y el desamor, la vida y la muerte, la felicidad y la tristeza, el sentirnos bien y el dolor. Todo ello forma parte de la vida, sino amamos nunca nos defraudaran, sino estamos vivos nunca moriremos, sino somos felices nunca sentiremos tristeza y sino nos podemos llegar a sentirnos bien nunca podríamos experimentar dolor.

Por ello, el que el día de hoy no me quiera levantar de mí cama, no significa que nunca me levante, que puede que no lo haga hoy o mañana, pero algún día me tendré que levantar por el simple hecho de ya estar acostado.

La incógnita de tener o no tener


¿Es posible anhelar tanto algo que cuando lo tienes no sabes qué hacer con ello?

O tal vez muy en el fondo nunca lo quisimos verdaderamente, y solo queremos lo que no podemos tener y nunca estamos conformes con lo que tenemos y cuando por fin logramos tenerlo no sabemos apreciarlo.

Puede que solo seamos poco agradecidos o inconformes con lo que tenemos y solo queramos lo que no podemos tener, pero mientras sigamos deseando algo más el día de mañana, pienso que ese tal vez es un buen incentivo para tener una razón de vivir. El camino que tenemos que pasar para tener lo que queremos. Después de todo ¿quién dijo que lo mejor de una montaña rusa es cuando te bajas y no el recorrido? Ya luego solo queda compartir la sensación con los seres queridos y recordar melancólicamente el trayecto vivido. Desear lo que no podemos tener e intentar alcanzarlo, de eso se trata.

Ya que nunca estamos satisfechos y queremos más, seamos felices de que siempre sea así. Si no, ¿qué sería lo siguiente?

miércoles, 4 de abril de 2012

Abismo en el corazón



Decepción, impotencia, celos, tristeza y melancolía son los sentimientos que ahora son tripulantes en esta nave llamada mi corazón. Si tan solo estuviera cerca de ti, si tan solo esta distancia que nos separa no estuviese de por medio, sin tan solo… pudiera entrar en tus pensamientos y saber porque actúas de esa manera. ¿Por qué haces lo que haces?
Dices que te entendería si estuviese en tu posición pero yo sigo sin entenderte, no sé si me tomo las cosas muy apecho o seas tú la que esté haciendo algo mal o sea yo, o ambos, y ninguno tenga la razón. De cualquier forma eso no importa, ya el daño está hecho, la herida es profunda y tal vez tarde en cicatrizarse o tal vez nunca lo haga. Solo puedo estar seguro de una cosa, y es que sigo amándola más y más cada día pese a todo, pese a la distancia, al poco tiempo que nos dedicamos juntos, aun así mis minutos y horas están abarcados por ella su imagen y su ternura incomparable.
_________________________________________________________________________
N/A: Si mi memoria no me falla este escrito lo realicé hace un buen tiempo ya, aproximadamente poco más de seis meses, luego de que abandonase por un tiempo el blog debido poca inspiración y una depresión. 

He soñado



No sé qué está pasando últimamente a mi subconsciente. He soñado con fantasmas amargos de un pasado que me hizo fuerte y que se empeñan en hacerme vivir una experiencia en el sueño de ensueño, tal cual un cuento de hadas, he soñado con personajes de un pasado muy lejano reencontrándonos como viejos amigos de infancia como si nada, he soñado con poemas lejanos de ser un poema que alguna vez leí y que probablemente aún en mi mente jamás llegare a tomar pluma y papel con afán de poetizarlo, he soñado viéndome envuelto en una embarazosa situación literalmente, embarazando a una chica que jamás en vida he visto pero si hemos sido compañeros de interminables charlas hasta amaneceres, sin siquiera poner en tela de duda que aquella situación es carente de lógica. Que  más prueba que esas incoherencias soez para algunos de que los sueños que yo sueño jamás serán mi anhelo de soñar con parpados abiertos, tal cual ventana veranea.

Por años he dejado de soñar, y si lo hice, bien no recuerdo tales sueños. Ahora que me veo envuelto en tantos sueños extraños que lo que más sueño es no poder volver a soñar o recordar, y solo espero que cuando me llegue ese sueño eterno que tantos temen, no sea más que un simple nada sin soñar. 
_________________________________________________________________________
N/A: No, aún no he muerto. He vuelto después de un temporada ausente en el blog, espero estar más presente y seguir haciendo lo que más me gusta, escribir.